III Ruta Las Cañadas 111kmtb 2012

La noche lluviosa del viernes hacía presagiar un día húmedo, por decirlo de una manera suave. Amanece con ese "chiribiri" que no sirve nada mas que para ponerte chorreando, dudas de cuánta ropa ponerte, whatsapp y twitter echando humo y solo me acababa de levantar Me arriesgo y no me pongo crema con Factor 30. Reviso la bici y salgo de casa de noche por todo el mundo.

Ya en la plaza, chocolate, churros, manos grasientas, bridas, dorsales y una variedad de chubasqueros que ponía en duda si se iba a salir en bici o a tirarse desde la estratosfera. Allí nadie dudaba que hoy se hacía la ruta, pese al "chiribiri". Echo de menos un furgón grande y el olor de un puro bajo un bigote. Mientras todo comenzaba, en casa, nuestros familiares nos tenían presentes en sus plegarias a la vez que confirmaban que nuestra locura no tiene remedio...

Comenzamos! A ritmo suave, en punto de partida a medio tiempo digamos, queda mucha ruta por delante, las gafas se van llenando de gotas, se echa de menos unos limpias en las lentes y con el jaleo típico a cola de pelotón, rodamos y rodamos. De repente un par de pinchazos casi seguidos y el "chiribiri" se anima. Eso hace que parte del grupo se replantee la aventura. Chicas y Protección Civil dando chubasqueros, continuamos, ya empiezan a caer gotas por la visera del casco.

Llegado el momento del desayuno parece que el "chiribiri" desaparece y nos permite tomar un cafelito rápido para entrar en calor. Bajo la mirada del guarda, cogemos un pastelito o plátano y continuamos con el camino. El terreno, sin ser muy pronunciado, va picando hacia arriba. Seguimos rodando dirección Ossa de Montiel por caminos anchos y en buen estado, con charcos y barro, pero en buen estado. Nos quitamos el chubasquero de nuevo. Ruta del Quijote ponía en postes al borde del camino, si no recuerdo mal y 900 y pico de altitud. Los más viejos del lugar comentaron que es una lástima que hubiera niebla e impidiera verlo todo con claridad. Lástima!! habrá que volver algún día.

Tras alcanzar el punto más alto de la ruta, seguimos "dándole de comer" al cuerpo cada 1.5h aproximadamente y llegamos a Ossa de Montiel donde paramos a otro avituallamiento. "Cabra coja no quiere siesta" se oye por enésima vez, mientras el frío nos envuelve. Tomamos algo rápido y dirección Ruidera, punto donde estaba prevista la comida. Con los chubasqueros puestos para evitar el frío aire mientras bajábamos de Ossa de Montiel vamos avanzando. Aparecen los problemas en algún biker, pero aun así, continuamos a buen ritmo subiendo a la Cruz de Ruidera, que viene a ser algo como el Cristo de Corcovado de Río de Janeiro pero a menor escala . Vistas preciosas, fotos de grupo e individuales de rigor y nos lanzamos a la comida por una bajada que aconsejaron bajarla a pié.

Ya en el Baño de las Mulas, y con los chubasqueros puestos para no perder temperatura tomamos un bocata de jamón (1 ó 1,5), fruta, café, pastelitos y hasta chupitos hubo. "Cabra coja no quiere siesta!" se vuelve a oír, por lo que continuamos la andadura, esta vez para adentrarnos por Ruidera. Senderos estrechos, subidas muy cortitas pero pronunciadas, piedras resbaladizas y algún que otro imprevisto, creo que sin mayor importancia, aunque no sepa tu nombre, espero que estés bien y no fuera nada

Tras las paradas técnicas que cada uno tiene que hacer por sí mismo, reagrupamos en la cadena y comenzamos un tramo de subida no muy fuerte de de unos 4km. De momento iba bien de piernas pero tenía la mosca detrás de la oreja por si aparecía el tío del mazo y se cebaba conmigo, pero con las bacinerías de unos y otros, fue peor pensarlo que pasarlo. Una vez arriba, volvemos a un camino ancho y en buen estado mientras que le damos de comer al cuerpo en marcha. (Me pasé 15 min de la 1.5h prevista para la toma de alimento )

Cruzamos la carretera N430 y tomamos dirección Alhambra. Cañada de Los Serrano y todo bajando me dijeron. Cuando había que subir algo... "Venga! si esto es lo último que hay que subir! Vamos! que luego es todo bajando". Al fin llegamos a "La cuesta del barro" como es conocida en este club, solo que en este caso tocó bajarla. Plato grande y a dejarse caer para ir descansando piernas. Con esto, llegamos a Alhambra, el camido de vuelta ya era de sobra conocido debido a rutas anteriores por lo que encaramos el carreterín que nos lleva directo a "La Calera". Por cierto! Nadie se atrevió a subir la cuesta de Alhambra y comprarme una bolsa de quicos, y eso que hasta le hubiera dado el dinero!

Una vez llegados a "La Calera", parada rápida y continuamos, que el frío, el cansancio, la amenaza de lluvia y la oscuridad sobrevolaban el pelotón. Monte a través, con tendencia a bajar salvo un repecho muy corto llegamos a "La Ventilla" con cierta rapidez, aunque no la suficiente para poder llegar al destino con luz diurna.

Cae la noche, entre maíces, con un coche a proa y otro en popa, avanzamos con la luz de los autos, esto trae consigo el pisar todos o casi todos los charcos, si aún quedaban partes de la bici sin manchar, era el momento. Un último esfuerzo para subir el puente de la autovía y aparecen amagos de calambres en algunos compañeros, ya era tarde, el reto estaba conseguido.

Sobre las 20h aparecemos por el pueblo desde la oscuridad como si de guardianes de la noche se tratase, bajo la atónita e intrigante mirada de los vecinos que había en la calle. Al fin llegamos a la plaza, lugar de salida casi 12h antes. Paro el móvil y marca 121.97km. Besos, abrazos, felicitaciones y fotos de rigor. Segundas cañadas sobre mis piernas, una de cal y otra de arena. Otro reto que se había conseguido. Me despido de todos agradeciendo el trabajo y el esfuerzo realizado y pensando en que solo quedan 365 días para el próximo reto.